domingo, 13 de octubre de 2013

JUGUETES

En una juguetería, un niño escoge un peluche de canguro. Va a la caja y le entrega un billete de monopoli a la cajera, ésta le dice amablemente:
-Amor, esto no es dinero de verdad.
Y el niño le contesta:
-Es que este tampoco es un canguro de verdad.